Día de la Salud Mental 2024.

En Chile, esta conmemoración ha ganado visibilidad en los últimos años gracias a los esfuerzos de instituciones públicas, organizaciones no gubernamentales y comunidades. La pandemia de COVID-19 marcó un punto de inflexión en la conversación nacional, revelando cómo el aislamiento social, la incertidumbre y el estrés afectarán a personas de todas las edades y sectores. Actualmente, uno de cada cuatro chilenos reporta haber enfrentado síntomas relacionados con trastornos de ansiedad o depresión, según cifras del Minsal.

Durante este día, se realizan actividades como seminarios, charlas, campañas en redes sociales y talleres de autocuidado que abordan temas como la prevención del suicidio, la desestigmatización de los trastornos mentales y la promoción de servicios de apoyo psicológico. El énfasis en la prevención y el acceso a tratamientos adecuados es una de las demandas más recurrentes de los colectivos ciudadanos, especialmente en un país donde los recursos para salud mental en el sistema público son limitados y muchas veces insuficientes.

A nivel educativo, las escuelas y universidades también han comenzado a incorporar el tema, fomentando espacios de diálogo y cuidado para estudiantes y docentes. A lo que nuestro liceo no ha sido ajeno, generando campañas y jornadas en busca de visibilizar esta necesidad.

Sin embargo, queda un largo camino por recorrer. Entre los principales desafíos está la necesidad de aumentar el presupuesto destinado a la salud mental, descentralizar los servicios para garantizar el acceso en zonas rurales, y promover una cultura de respeto y apoyo emocional en los espacios laborales y sociales.

El Día de la Salud Mental en Chile no solo es una oportunidad para reflexionar sobre los avances y pendientes en la materia, sino también un llamado a la acción colectiva para construir un país más empático, donde la salud mental sea una prioridad.

Linsem- Día de la Salud Mental 2024.